Cuando ya logramos constituir la asociación en Huelva, carecíamos de apoyo, pero gracias a la Parroquia de la Concepción, que nos dejaron una pequeña sala para dar terapias una vez por semana, y como en poco tiempo acudió mucha gente, alquilamos en la calle Daniel Vázquez Díaz, que nos costaba 80.000 pesetas, y nos podíamos hacer frente a ello. Pedimos auxilio a las autoridades de Huelva, y gracias a una gran persona, Don Carlos Sánchez Nieva, que en aquel momento era el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía, nos cedieron los locales de la Avenida Cristóbal Colón 91, que es donde seguimos, y por la que han pasado alrededor de 5.000 personas.

¿Cuáles cree que son los principales logros obtenidos en estos 20 años?
–Para nosotros es un gran logro estar en la federación andaluza, Fajer, también valoro la colaboración que he tenido por parte de mi junta directiva y de los voluntarios. Y también es muy importante que en el año 2009, conseguimos que la Junta de Andalucía nos concediera el permiso de centro de tratamiento ambulatorio.

 

Una vez que se cae, el problema ya está ahí, pero, ¿qué consejos le daría a la población para que no llegara a caer?
–Primero de nada, que antes de echarle a una máquina, que lea bien lo que pone en el frontal, y que sepa lo que le puede pasar. Esta es una adicción tan potente o más que las drogas o el alcohol. Recomiendo que se juegue lo menos posible, pero es casi imposible, porque aquí en España, la segunda nación después de Filipinas donde más se juega, hay un abanico tan amplio de posibilidades...

En Huelva hay muchísimos salones de juego, y paradójicamente uno de ellos está justo en frente de vuestra sede...
–Pues sí, fíjate qué paradoja. Nosotros estamos ahí desde el año 91’, y a principios de 2000 nos ponen en frente un salón de juegos, en contra de la opinión general de la sociedad, y, por supuesto, en contra de la asociación. Bueno, ahí está, y tenemos que vivir con ello, porque quiero matizar que nosotros no estamos en contra del juego, sino en contra del abuso del juego.

Los que dejan de fumar dicen que se acuerdan del cigarro toda la vida, ¿esta adicción es igual?
–Es lo mismo. Porque además, como pasó hace poco que una persona ganó no sé cuántos millones de euros, te lo ponen como algo muy bonito en los medios de comunicación, y el enano gigante que tienes en la cabeza está siempre martilleándote. Los medios de comunicación, que son muy necesarios, te cuentan las noticias de los premios, pero no te cuentan que un tío está durmiendo bajo un puente y comiendo de los contenedores por culpa del juego.

¿Cuál es el perfil actual de las personas que caen en este tipo de adicciones?
–Cuando entré en la asociación hace 20 años, el perfil era de una persona de unos 45 años con mucho tiempo libre. Hoy, la media ha bajado por debajo de los 30 años. Muchos chavales, con el paro, intentar dar un pelotazo. Tenemos incluso un caso de un chaval que tiene 14 años, que le quita dinero a sus padres y a sus abuelos para ir a las tragaperras. También estamos atendiendo a muchas personas, sobre todo mujeres, con problemas de compras compulsivas, y con el tema de internet también hay muchísimos problemas, gente que se pasa 20 horas al día delante de un ordenador.

¿Qué porcentaje de éxito tiene las terapias que Aonujer lleva a cabo?
–El 99,99% de las personas que completan los cuatro meses de inicio, el año de rehabilitación y los dos cursos escolares con la psicóloga, supera la adicción.

 

Cuando ya logramos constituir la asociación en Huelva, carecíamos de apoyo, pero gracias a la Parroquia de la Concepción, que nos dejaron una pequeña sala para dar terapias una vez por semana, y como en poco tiempo acudió mucha gente, alquilamos en la calle Daniel Vázquez Díaz, que nos costaba 80.000 pesetas, y nos podíamos hacer frente a ello. Pedimos auxilio a las autoridades de Huelva, y gracias a una gran persona, Don Carlos Sánchez Nieva, que en aquel momento era el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía, nos cedieron los locales de la Avenida Cristóbal Colón 91, que es donde seguimos, y por la que han pasado alrededor de 5.000 personas.

¿Cuáles cree que son los principales logros obtenidos en estos 20 años?
–Para nosotros es un gran logro estar en la federación andaluza, Fajer, también valoro la colaboración que he tenido por parte de mi junta directiva y de los voluntarios. Y también es muy importante que en el año 2009, conseguimos que la Junta de Andalucía nos concediera el permiso de centro de tratamiento ambulatorio.

 

Una vez que se cae, el problema ya está ahí, pero, ¿qué consejos le daría a la población para que no llegara a caer?
–Primero de nada, que antes de echarle a una máquina, que lea bien lo que pone en el frontal, y que sepa lo que le puede pasar. Esta es una adicción tan potente o más que las drogas o el alcohol. Recomiendo que se juegue lo menos posible, pero es casi imposible, porque aquí en España, la segunda nación después de Filipinas donde más se juega, hay un abanico tan amplio de posibilidades...

En Huelva hay muchísimos salones de juego, y paradójicamente uno de ellos está justo en frente de vuestra sede...
–Pues sí, fíjate qué paradoja. Nosotros estamos ahí desde el año 91’, y a principios de 2000 nos ponen en frente un salón de juegos, en contra de la opinión general de la sociedad, y, por supuesto, en contra de la asociación. Bueno, ahí está, y tenemos que vivir con ello, porque quiero matizar que nosotros no estamos en contra del juego, sino en contra del abuso del juego.

Los que dejan de fumar dicen que se acuerdan del cigarro toda la vida, ¿esta adicción es igual?
–Es lo mismo. Porque además, como pasó hace poco que una persona ganó no sé cuántos millones de euros, te lo ponen como algo muy bonito en los medios de comunicación, y el enano gigante que tienes en la cabeza está siempre martilleándote. Los medios de comunicación, que son muy necesarios, te cuentan las noticias de los premios, pero no te cuentan que un tío está durmiendo bajo un puente y comiendo de los contenedores por culpa del juego.

¿Cuál es el perfil actual de las personas que caen en este tipo de adicciones?
–Cuando entré en la asociación hace 20 años, el perfil era de una persona de unos 45 años con mucho tiempo libre. Hoy, la media ha bajado por debajo de los 30 años. Muchos chavales, con el paro, intentar dar un pelotazo. Tenemos incluso un caso de un chaval que tiene 14 años, que le quita dinero a sus padres y a sus abuelos para ir a las tragaperras. También estamos atendiendo a muchas personas, sobre todo mujeres, con problemas de compras compulsivas, y con el tema de internet también hay muchísimos problemas, gente que se pasa 20 horas al día delante de un ordenador.

¿Qué porcentaje de éxito tiene las terapias que Aonujer lleva a cabo?
–El 99,99% de las personas que completan los cuatro meses de inicio, el año de rehabilitación y los dos cursos escolares con la psicóloga, supera la adicción.